La preparación implica unos pocos pasos sencillos pero importantes. Evite el alcohol, el tabaco y ciertos medicamentos según le indique su equipo médico. Asegúrese de que su cuero cabelludo esté limpio y bien descansado antes del procedimiento. Planifique su agenda para que pueda descansar durante los primeros días después del trasplante.
Sí, algunos medicamentos pueden aumentar el sangrado o afectar a la cicatrización. Su equipo médico revisará sus recetas actuales y le indicará cuáles debe suspender y durante cuánto tiempo antes del procedimiento. Siga siempre las indicaciones médicas profesionales antes de suspender cualquier medicamento.
En muchos casos, sí, pero depende de la enfermedad específica y de su control. Las personas con enfermedades crónicas como diabetes, afecciones cardíacas o trastornos autoinmunes deben someterse a una evaluación médica para garantizar que el procedimiento sea seguro para ellas.
Sí, la mayoría de las clínicas requieren análisis de sangre rutinarios para verificar si hay infecciones, la capacidad de coagulación de la sangre y el estado de salud general. Estas pruebas ayudan a garantizar un procedimiento seguro y una recuperación sin problemas.
En la mayoría de los casos, la clínica se encargará de cualquier recorte o afeitado necesario para el procedimiento. Para ciertas técnicas como la DHI, es posible que no sea necesario afeitarse en absoluto. Su equipo médico le dará instrucciones específicas basadas en su plan de tratamiento.
Los tratamientos tópicos suaves suelen estar bien hasta unos días antes de la cirugía, pero ciertos productos pueden irritar el cuero cabelludo o afectar a la cicatrización. Su equipo médico le indicará exactamente cuándo debe interrumpirlos antes del procedimiento.
Si su trasplante se realiza con anestesia local, generalmente se recomienda una comida ligera para mantener su energía estable. Evite las comidas muy pesadas o grasientas en la mañana del procedimiento.
Lo mejor es limitar la cafeína el día de su procedimiento, ya que puede aumentar la sensibilidad y afectar potencialmente al sangrado.
El día de su procedimiento, llegue con el cabello limpio y sin productos. Evite geles, aerosoles o cremas de peinado, ya que estos pueden interferir con la precisión quirúrgica.
Sí, incluso si se utiliza anestesia local, puede sentirse cansado o mareado después. Es más seguro y cómodo que alguien le lleve a casa.

